Si no se desea
preparar es fácil conseguirlo, en Tlalpan al igual que en otras zonas de México, es posible encontrar quien lo venda, pero eso si, ha de ser muy temprano por las mañanas, los vendedores con sus
botes y sus anafres (para mantenerlos calientes) suelen colocarse en esquinas
transitadas, cerca de las escuelas, oficinas y con seguridad los encontrara muy
cerca de las Iglesias, donde también es probable que por la noche esperen a la gente que sale de misa.
Lupita Ramos, experta preparadora de champurrado y a
quien frecuentemente me encuentro por las mañanas frente a la Iglesia de Santa María de los Apóstoles, que esta
ubicada entre el Periférico y Coscomate, a una cuadra de la Av. Renato Leduc,
en Tlalpan, asegura que el secreto para
que quede delicioso esta en poner los ingredientes en las proporciones
correctas y darle su tiempo de cocimiento a fuego suave para evitar que tome sabor a quemado.
Doña Lupe, como la
mayoría de quienes venden champurrado,
suele ofrecer también otros atoles deliciosos como el de guayaba o de fresa que
generalmente se acompañan de ricos y deliciosos tamales.
¿Usted gusta?
¡Hasta la próxima!
Diana Reyes
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